Oda a la Herramienta.

Esta oda fue y está dedicada al maestro y amigo chileno Eugenio Calderón.

¡Oda al acero y al que lo forjó!
¡Y que viva el martillo!
¡Y el que martilló!
¡Y que viva el artesano!
Que a todos ellos los trabajó.

Que vivan las forjas,
Y que viva Usted,
Maestro del templado,
Del golpe y del vaciado.

Oda al filo,
Que separa lo bueno de lo innecesario,
Al serrucho,
Que dimensiona la madera, para construir la mesa familiar.

Al destornillador,
Que convence al tornillo,
Dándole otra vuelta a la rosca,
Hasta que todo se convierte en uno.

A la escuadra,
Y su rectitud digna de fiar,
A la prensa,
Tenaz e incansable,
A las pinzas,
Trabajadoras hermanas e inseparables,
A la morsa,
Gorda y lenta,
Con cicatrices de los errores,
Pilar fundamental del banco de trabajo,
A la hora de encarar cualquier desafío.

¡Oda al matrimonio entre la gubia y el formón!
Macho y hembra carpinteros,
Gubia curvadas tus caderas.
Hembra afilada al brillo,
Afinando entre los rulos de madera,
Cual cabellos revueltos y salvajes.

Formón recto y simple,
Trabajador incansable de frente,
Agudo en tu punto de vista,
Resistente a los golpes de la vida.

Macho y Hembra carpinteros,
Trabajando juntos el destino,
Los une la noble madera,
Que respalda su lado más flaco.

Y vaya este homenaje,
A los fierros más simples y oxidados,
Y a los más complejos y lustrados,
Que se heredan de mano en mano,
Con historia de abuelos,
Con sangre de padres,
Con pasión de niños,
Con técnicas de experiencia,
Con alma de taller.

Esta Oda sencilla,
Es a la herramienta.
Esa que se anticipa a la necesidad,
La que sentimos todos al crear,
Y que todos adoramos saciar,
Al momento de empuñar,
Una buena herramienta.

Estimado Eugenio Calderón:

De su mano y habilidad,
Nace el medio,
La posibilidad,
La concreción,
La solución,
El parto mágico de la creación,
La unión de la idea con la invención.
Gracias gran maestro por crear la herramienta,
Que nos permite crear,
Incluso mucho más, de lo que Usted sueña,
Y nosotros imaginamos.

MGC13.